Si uno tiene previsto viajar, lo lógico sería trazarse un plan que incluyera los lugares que queremos visitar; un tiempo para hacer el viaje; los medios económicos para afrontarlo; en definitiva, las formas de hacer el sueño posible.

La reforma de tu casa es como ese viaje, y requiere de la misma planificación. Con esto claro, plantear  una estrategia para llevar a cabo el proyecto, es básico.

1-Especificar cuáles son mis necesidades

En las primeras charlas, suelo proponer un ejercicio muy productivo: Imaginar el proyecto como si no existieran limitaciones de ningún tipo.

Es asombroso ver como salen  a la luz muchas necesidades que de otra manera no se hubieran manifestado, justamente porque las limitaciones que nos imponemos terminan enmascarando lo que realmente nos gusta. Por lo general, las nuevas ideas son innovadoras y expresan lo que de verdad queremos y nos permiten ver el futuro, evitando problemas difíciles de resolver después.

Por ejemplo: cuando en tu proyecto original no preveías un tercer dormitorio, sólo porque en ese momento “eran nada más que dos”. Puede ser muy complicado ubicarlo luego, cuando nunca tuviste en cuenta su posible existencia.

Siempre será preferible un proyecto generoso, que puedas construir por etapas, que un proyecto mezquino que no admita crecimientos naturales.

Es decir, que lo primero que tenemos que desarrollar es una técnica para destrabar ideas. ¡Ojo! esta no es una forma mágica de llevarlas a la realidad. No hay que olvidar que todo aquello que se imagina debe poder construirse, para no correr el riesgo de transformarlo solamente en un sueño.

Como primer paso necesitamos conocer nuestras necesidades, las normativas que hay que cumplir en la ciudad (Código Urbanístico y Código de Edificación) y Reglamente de Co-propiedad, en el caso de que se trate de un edificio de viviendas.

2-Conocer el edificio

Arrancamos por estudiar la vivienda, su ubicación, superficie, antigüedad, estado de conservación, si tiene patologías importantes y el tipo de materiales con los que está construida. Una de las cuestiones que más preocupan son las sobrecargas para evitar dañar las estructuras.

Si prevemos una etapa de demolición hay que tener muy estudiado el desescombro y la seguridad del propio edificio y de sus trabajadores. Es altamente recomendable contar con un profesional confiable en esta etapa: no solo para que haga el diagnostico correcto sino también, alguien que sepa guiarnos en los imprevistos que toda remodelación acarrea.

3-Tener el presupuesto claro

Con cuanto contamos, hay que conocerlo desde el principio, para saber si las ideas se pueden llevar a cabo. Por experiencia propia, el presupuesto inicial casi siempre termina incrementándose, porque a medida que avanza la obra pueden aparecer imprevistos; además, suele darse el caso que nos entusiasmamos y queremos más.

Por eso, los proyectos no suelen estar totalmente cerrados hasta que las obras comienzan a avanzar y son estas razones las que hacen necesario tener una buena guía profesional, que nos ayude a llegar a puerto y no irnos por las ramas.

Visto en Duanbason4-Rodearse de un buen equipo

La reforma de tu casa será un momento muy especial en tu vida. Piensa que en un puñado de metros cuadrados, verás convivir una “pequeña gran familia”.

Voluntades encolumnadas detrás de un único objetivo: llevar a cabo una construcción segura, económica y terminada a tiempo (tareas nada sencillas).

Tendrás que convivir con albañiles y sus ayudantes, plomero, gasista, electricista, vidriero, yesero, herrero, cerrajero, colocador de alfombras, jardinero, pintor, techador, carpintero, operario de teléfonos, al de la compañía de cable y hasta algún vecino curioso.

Amén de esta multitud, también deberás sufrir el bombardeo de:

“Opinólogos”, es decir, amigos “que las saben todas”.

“Expertos” en ver programas de diseño de la televisión por cable.

“Decoradoras de alma”, asiduos consumidores de revistas de decoración.

Por eso tendrás que dedicar el tiempo necesario para formar un equipo de trabajo de buena calidad técnica, y por sobre todas las cosas, compuesta de buenos recursos humanos.

5-Definir el proyecto: distribución, aislamiento, eficiencia y materiales

Esta es la tarea más importante para emprender la reforma con éxito. Es necesario meterse en el alma de la casa, conocer cada rincón, saber lo que puede cambiar, lo que se debe reforzar, lo que no puede tocarse y el lugar adecuado para las instalaciones. También determina de qué forma se construirán las nuevas divisiones, cómo y dónde se incorporará aislamiento térmico, el tipo de ventanas más adecuado según el clima… y todo esto sin perder de vista cuanto puede gastarse.

La reforma integral es una oportunidad para actualizar por completo los conceptos de distribución y sacar el verdadero potencial de una casa, casi siempre oculto tras excesivas compartimentaciones. El reto consiste en conseguir más, con los mismos metros cuadrados: más luz natural, más almacenamiento, más fluidez, más amplitud visual mediante la implementación de conceptos de planta abierta, más espacio de uso….

Es el momento de decidir si queremos incrementar el aislamiento y la eficiencia térmica, el posible uso de energías renovables, la racionalización y optimizaciones de los sistemas constructivos y de las instalaciones técnicas. Decisiones que repercuten, no solo en el presupuesto o la forma de resolver la distribución, sino en la calidad de vida y mantenimiento de la vivienda.

6-Pedir varios presupuestos

Hay que partir de una memoria (listado de tareas) y mediciones precisas, que contemple todos los trabajos a realizar con sus especificaciones y las calidades de los productos a emplear. Esta etapa requiere un estudio comparativo minucioso, para que luego se pueda discernir qué cotizaciones son las más interesantes, así como cuáles son las formas de pago y los plazos para empezar y terminar los trabajos.

Aquí hay que tener mucho cuidado con los presupuestos muy bajos. ¡Atención! no hablo de descartar un presupuesto conveniente, sino más bien de tratar de diferenciar: cuándo es conveniente. A tal efecto, las referencias de trabajos realizados permitirán ponerte en contacto con anteriores clientes, quienes podrán darte un panorama real de lo que se puede esperar.

Nos vemos…