Te lo pusiste a pensar. Creo que todos reflexionamos un poco en como acomodar nuestro día a día. Por ejemplo, atender ¿Qué tiene de especial tu casa?

Una buena vista, la cocina que siempre soñaste, un rincón donde acurrucarse a leer en estos días de encierro, ese balcón que te conecta con el mundo…

Sin duda, no poder salir es difícil. Todo este tiempo guardado en casa, se complica para la gran mayoría. Somos más conscientes de como compartimos nuestros espacios y que limitaciones tienen nuestras casas.

Pero hoy más que nunca, el hogar es símbolo de seguridad: nuestro refugio.

Empezamos a observar que cuando todas nuestras actividades, desde trabajar a hacer deporte,  se realizan en casa,  la multifuncionalidad de los espacios cobra más sentido.

Con el confinamiento, vuelven a aparecer las bicis fijas, las mancuernas o el Mat de yoga y ni hablemos del espacio para el teletrabajo o la tarea escolar de los chicos. Esto, nos hace pensar en la necesidad de contar con lugares fácilmente transformables.

Para muchos, el rincón de la PC, que solo utilizaba para distraerse un rato con internet, se ha convertido en el lugar en el que más tiempo pasa durante el confinamiento. Y pequeño problema de convivencia se genera hoy, si la PC no tenía un lugar específico y no nos queda más remedio que dividir la mesa del comedor entre varios para poder avanzar.

Esto nos lleva a pensar, que incluir espacios destinados al teletrabajo, ya sea porque le destinamos un ambiente específico o porque forma parte de una situación reconfigurable a lo largo del día, se está volviendo algo indispensable en cada casa. Ya sea, porque muchos han descubierto, que trabajando desde casa son más productivos o por la sospecha, que situaciones como esta, se pueden repetir y hay que estar mejor preparados.

Incorporar naturaleza dentro de la casa es otra necesidad. Las plantas son un elemento decorativo excelente y muchos otorgan a estos vegetales de interior el poder de, además, regenerar el aire. Pero, ¡ojo! es una exageración, ya que abrir una ventana es lo más útil para limpiar el ambiente. Pero cuidar de las plantas que tienes en tu casa, si tiene una función terapéutica en momentos de encierro; aprovecha para echar materia orgánica a tus macetas (restos de café, cascaras de huevo,…), trasplanta y llénate las manos de tierra.

Intenta colocar las macetas en lugares visibles y en los que pases más tiempo y tómate una infusión o lee un libro junto a tus pequeñas zonas verdes

Si desde tu ventana ves naturaleza, dedica tiempo cada día a observarla, a olerla, a escuchar el canto de las aves, abre la ventana y deja que el sol y el aire entren en ti y en tu casa.

Ni hablar del protagonismo que han cobrado los balcones y terrazas. Son los espacios donde recibir un poco de aire después de una jornada de teletrabajo o incluso un espacio donde poder realizar manualidades con los chicos.

También el balcón se ha convertido en un área de interacción con los vecinos donde además de salir a aplaudir podemos llegar a establecer conversaciones o gestos de complicidad.

¿Qué haces en casa estos días? ¿Estás redescubriendo tu casa y ya planeas hacer algún cambio?

Nos vemos…