Cuando hablamos de reformar siempre pensamos en una obra, mucho polvo, gente dando vueltas, especialmente si nos referimos a la cocina. Pero no tiene porqué ser así. Es que estrenar cocina es un sueño recurrente, nos guste o no cocinar. Cuando vemos esos gabinetes modernos, las nuevas terminaciones en paredes o pisos y como ha cambiado la forma de iluminar este espacio, renovar nuestra cocina es una idea recurrente. Pero, siempre hay un ¨pero¨, sabemos que la cocina es uno de los ambientes más caros de la casa. Entonces, el desafío es empezar a pensar que cambios puedo hacer para sentirme en una cocina nueva, pero que no represente ¨la obra¨. Bueno, hoy en día existen muchos nuevos productos y técnicas pensados para hacer cambios sin obras. Así que, priorizar tus necesidades, limitar los cambios y elegir bien los materiales son los pasos que marcarán el coste de la reforma.
La primavera y el verano son épocas ideales para llevar a cabo estos cambios que durante el resto del año se hacen demasiado trabajosos o no hace el tiempo adecuado. Así que manos a la obra:
Darle una mano de pintura a las paredes, es una de las reformas más fáciles, económicas y a la vez puede conseguir un gran cambio. Sobre todo si eliges un color diferente al que ya tenías. Siempre lo más recomendable es apostar por colores claros y luminosos que te aporten luz aunque también puedes jugar a los contrastes y pintar, en pequeñas dosis, con colores más fuertes y oscuros. No interesa que la tengas azulejada, hoy en día existen excelentes pinturas para azulejo muy fáciles de aplicar y fácilmente cambias la cara de tu cocina con una mano de pintura.
También puede ser una buena idea pintar una pared o parte de ella con pintura de pizarra donde poder apuntar las compras o los mensajes para el resto de la familia. Ahora hay muchos más colores de pizarra y ya no tiene porqué ser negra.
Otra idea muy original es poner papel pintado en lugar de pintar. Se puede trabajar por sectores. Pero el efecto será inmediato y le dará a tu cocina un aspecto totalmente renovado. Existe gran variedad de papeles de cocina y muchos están especialmente diseñados para ambientes húmedos.
Si te gustaría cambiar la terminación del piso, debes considerar que en la cocina debes dejarte guiar por lo estético pero, sobre todo, por lo práctico. La cerámica o el porcelanato son las mejores alternativas para el piso. Sus superficie son capaces de imitar todo tipo de acabados (madera, mármol, pizarra) y, además de resistente y fácil de limpiar, hay gran variedad de precios, incluso buenas segundas marcas.
En las cocinas modernas el microcemento es una alternativa para recubrir tanto el piso como encimera. Su ventaja es que se instala encima de la superficie existente sin necesidad de quitar el revestimiento anterior, lo que abarata costes y reduce la duración de la obra.
Si lo que te cansaron son tus muebles de cocina, y encima presentan marcas, cortes, manchas, cambiarlos sería una buena solución si estuvieran a otro costo. Si bien el precio varía mucho dependiendo del material que elijamos, igual no llegamos.
Bien, podemos cambiar solo partes. Por ejemplo reemplazar las alacenas de arriba por esos modernos estantes, que resultan muy cómodos y sencillos de instalar.
Claro que si te gusta tener todo oculto tras las puertas, una opción sería cambiar solo las puertas. Quizás cambias las de arriba haciendo un juego de colores con las de abajo o combinas puertas con estantes. El cambio, al trabajar sobre las alacenas superiores, será contundente.
Otro de los elementos que tenemos más a la vista pero a veces se nos olvida es la grifería. No solo es una cuestión estética, sino también práctica. Y es que los nuevos modelos incorporan dispositivos que permiten ahorrar agua y son mucho más sostenibles. Además de tener unos diseños fabulosos.
A veces hay pequeños detalles que parece que no tienen importancia y sin embargo pueden ser muy importantes. Los tiradores con el paso del tiempo y el uso se estropean y se ponen feos. Además las modas cambian en el tiempo y los tiradores también se ven afectados por ello. Si tus muebles son en un solo color, un cambio de tiradores puede ser una opción sencilla y económica y que puede aportar un cambio de look interesante en tu cocina.
A veces con pequeños cambios sumados podemos lograr una transformación total que nos ayudará a renovar la cocina. Nos vemos…