En el post anterior, dimos algunas claves para pensar en el cuarto del bebé y como modificarlo para convertirlo en el espacio del niño de tres a diez/once años; pero que hacer cuando entramos en la adolescencia.
En esta etapa su dormitorio es su refugio privado y como tal, querrá decorarlo a su gusto.Los adolescentes de hoy son diseño-conscientes y al tanto de lo último. Pero están divididos, la mayoría tiene juguetes queridos que no está dispuesto a renunciar pero al mismo tiempo quieren un cuarto mas sofisticado que su habitación infantil. Por todo esto un dormy para adolescente debe constar con tres zonas:
Zona para dormir: generalmente la estructura de la cama incluye un colchón extra para ese amigo/a que suele quedarse. Y un módulo de solo 30 cm de fondo cumple la función de mesilla de noche y de cabecero. No lo podemos pensar como un espacio solo para dormir. A medida que comienzan a explorar su independencia, tener una habitación donde pueden pasar el rato, estudiar y reunirse con amigos es casi más importante para ellos que el sueño.
Como lo resolvemos cuando hay poco espacio? Pues soluciones hay varias, por ejemplo: las camas sofá con escritorio integrado y una mullida alfombra como lugar de reunión, otra son las camas altas con escritorio debajo o al revés cama abajo y escritorio arriba; una cama nido con espacio de guardado abajo que puede ser alta o baja.
Zona para estudiar: A medida que el niño va creciendo, la zona de juegos va desapareciendo a favor de la zona de estudio. En este sentido, será vital encontrarle un buen lugar, en lo posible cerca de una ventana y alejado de distracciones y posibles fuentes de ruido que puedan romper su concentración.
Para que la mesa sea cómoda lo ideal es que mida al menos 120 cm de largo por 60 cm de ancho. Es ideal que tenga un espacio para guardar sus cosas, como una cajonera y nunca están de más un par de estantes para tener a mano sus libros y objetos más personales, como fotos o recuerdos. Presta especial atención a la silla, a esta edad no es algo menor. Uno se acostumbra a determinadas posturas que luego son difíciles de modificar. Recuerda que debe ser mullida, los pies deben tocar el piso, respaldo alto y ojo con su forma.
Zona de guardado: Por un lado, la que esta cercana al escritorio y por otro, el ropero para su ropa, ahora si con puertas. Los adolescentes y las habitaciones ordenadas son una rara combinación, de ahí la necesidad que existan muchos lugares donde guardar sea fácil. La presencia de puertas nos ayudan a controlar el caos.
Colores: Todo esto en un cuarto preferentemente con paredes en tonos claros y neutros, así el niño puede colgar lo que quiere y de los colores que mas le gusten.
Espero que estos datos te hayan resultado útiles, nos vemos.
