Hasta no hace mucho, nadie sabía lo que significaba el concepto hygge. Esa palabra tan de moda últimamente, es la forma en la que los daneses tienen de llamar a la felicidad que encuentran en las pequeñas cosas, compartiendo momentos con amigos y familia y disfrutando del hogar. Con el tiempo pretende convertirse en algo mas que una moda, es una actitud o un estilo de vida que nos invita a disfrutar de los pequeños placeres que tenemos a mano, siendo conscientes de ellos. Y para conseguirlo, la atmósfera en casa es fundamental. Cuale son algunas de sus claves:
El imperativo es poco pero bueno. Elimine todo el desorden en su hogar. Con pocos muebles y elementos de la decoración del hogar, pero ¡ojo! cuidadosamente elegidos, seguramente te permitirán vivir en armonía. Quédate solo con lo que te gusta.
Primero que nada: utiliza materiales naturales en casa, desde los muebles de madera a los textiles de algodón, cáñamo o lino. Esto también, significa evitar las pinturas tóxicas y los materiales excesivamente industrializados, y prefiere la buena mesa artesanal antigua, tal vez es que pudiste recuperar de la casa de la abuela. Hazte con muebles ligeros, naturales y con carácter. Dale prioridad a los pisos de madera y a rodearte de materiales naturales.
Apuesta por la comodidad, y llena tu casa de alfombras, cojines y mantas. Pero recuerda: pocas cosas.
Igualmente importante es crear la atmósfera correcta: ¡con luz, pero también con el aire! Y, por lo tanto, deje espacio para ventanas y ventanas grandes con mucho vidrio. Intente lograr una iluminación suave y ángulos de claroscuro ligeramente oscurecidos, alternando luz natural y artificial. Para el artificial, evite usar solo luces de suspensión (las lámparas de araña) y prefiera lámparas de pie, con las cuales puedes elegir iluminar suave
mente cambiando el aspecto de un lugar a otro del hogar.
La luz de la llama es otro factor en el ambiente hygge. Utiliza el poder de las velas para crear un ambiente confortable. A ser posible, de cera de abeja, sin aroma alguno.
Pero un hogar hygge también está hecho de personas: recibir a muchos amigos en casa, estar preparado para recibir amigos en cualquier momento, implica, dejar espacio para mesas grandes con sillas o sofás espaciosos, listos para convertirse en una cama extra.
Llena tu casa de detalles que te hagan feliz, el estilo hygge se centra en uno mismo, en sus propias pasiones y aficiones: apagar el teléfono inteligente y dedicar un rincón de nuestro hogar para uno. Una esquina para pintar, leer o simplemente para descansar y meditar.
En este nido de relajación, las plantas no pueden faltar, estos amigos de bienestar, perfumados y que ahuyentan los malos pensamientos, dan color y nos ayudan a conectar con la naturaleza. Puedes elegir plantas tan grandes como un ficus o pequeña como un potus, para colgar donde más te guste. Diviértete creando esquinas elegantes con suculentas, junto a macetas con cactus grandes y pequeños.
En síntesis: se trata de crear una atmósfera cálida y confortable, es una comida agradable en familia o con amigos, es el disfrute de tomar esa taza de café caliente, leer un libro en el sofá envuelto en la calidez de una manta. Significa tratar de vivir felizmente, disfrutando el placer de las pequeñas cosas que a deberían formar parte de nuestro día a día. Es un arte que se puede aplicar a nuestros enteros vidas y por lo tanto nuestra casa
Estos son todos pequeños pasos, que no requieren grandes gastos, pero que pretenden hacernos vivir bien.
¿Te animas a crear un ambiente hygge en tu casa?