La vida va cambiando y la cocina debe adaptarse a las nuevas exigencias. La falta de espacio requiere que sus funciones se integren en pequeñas superficies. El orden en la cocina resulta fundamental para tener a mano nuestros utensilios y alimentos y, al mismo tiempo, fuera de la vista. ¿Cómo conseguirlo?
Decidir su distribución: donde cocino, dónde lavo, donde guardo. Considerar cuantos somos, con cuanta frecuencia la usamos. Decidir su distribución es ideal para maximizar de forma simple, el orden.
Almacenamiento por niveles: una buena opción para aprovechar el espacio y facilitar la organización y la accesibilidad.
El primer nivel se dedica a los objetos de uso frecuente, como pueden ser cubiertos, cuchillos de cocina, cucharones, espumaderas y otros.
El segundo nivel se destina a vajilla y alimentos. Existen accesorios que ayudan a ordenar platos. Las cajas combinables, por su parte, permiten organizar los alimentos.
Los utensilios de gran tamaño, como las ollas, se almacenan en el tercer nivel. Estos cajones son, por lo general, más profundos.
Todo a la vista: elige cajones en las zonas bajas de tu cocina, en lugar de puertas. Luego accesorios para abrir el cajón y tener todo a la vista:
Cubierteros, separadores, cajas de diferentes tamaños, Enrollar un repasador alado del otro en lugar de apilarlos. Es importante que todo lo que pongamos en ellos esté accesible y se pueda localizar de un vistazo.
Zona de columnas: la limpieza visual es sinónimo de limpieza mental.
Todo el mundo cocina mejor en un ambiente sereno y despejado. Las zonas de columnas suelen albergar espacios de almacenaje y electrodomésticos de grandes dimensiones.
Además, las columnas con puerta corredera ofrecen la posibilidad de disponer de una zona auxiliar de trabajo, con tomas de electricidad e iluminación propia.
Muebles con persiana o puertas rebatibles hacia arriba: en lugar de las puertas tradicionales, constituyen un recurso ideal para cuando contamos con poco espacio de cocina. Este tipo de sistemas de apertura evitan el riesgo de golpes y facilitan una visión panorámica del interior del mueble. Cuando no queremos que todo esté visible a los ojos de los demás, sino que se vea solo cuando lo necesitamos.
Sistemas giratorios para rinconeros: desde ollas, cacerolas y sartenes, hasta electrodomésticos y vajilla que no usamos porque no vemos. Estos accesorios logran hacer del rincón del mueble bajo mesada un lugar fácil de acceder. Permite visualizar todo lo que tenemos en ese amplio espacio que se convierte en un lugar desperdiciado si no facilitemos su acceso.
Accesorios sobre mesadas: para aquello que necesitamos tener más a mano.
Nos permiten acceder fácilmente a condimentos, cucharas, manoplas, en fin, utensilios que usamos todo el tiempo.
Organiza un espacio para la basura: Reduce, reutiliza y recicla.
El camino a seguir para un consumo responsable. Las cocinas deben integrar soluciones para organizar la basura. Por lo general, es un espacio bajo mesada, bajo la pileta o muy cercana a esta. Los módulos extraíbles son, hoy por hoy, la mejor opción para organizar la basura, así no tenemos por qué renunciar a soluciones funcionales y estéticas de una cocina convencional.
El orden es una temática que cobra cada vez mayor protagonismo, y no está vinculado con una “obsesión” por tener todo perfecto, sino por los beneficios que conlleva encontrar lo que necesitamos sin esfuerzo, rápidamente.
Optimizar es la regla. Aprovechar cada uno de los recursos finitos que tenemos, desde el cada metro cuadrado, hasta cada minuto de nuestro tiempo. El orden, sin lugar a dudas genera una satisfacción a veces imperceptible, pero muy valorada cuando no encontramos aquello que tanto buscamos.
Nos vemos…